A veces pienso que vivo demasiado deprisa. Si eso es cierto, hay cosas a las que siempre llego tarde.
Por ejemplo, el año nuevo. Desde que estoy en Londres los puntos de inflexion grandes en mi vida han sido siempre en febrero, o inlcuso marzo. Y lo confirmo al releer archivos antiguos, con una mezcla de ay!-que-gracia y ay!-que-verguenza. Un cambio de casa, un cambio de trabajo, un cambio de vida... Que me obliga a pulsar el reset.
Sin embargo, a fin de cuentas lo que marca las etapas de la vida son las personas que te acompañan en ellas. Es el camino lo importante, no la llegada. Por eso lo que importa es quien camina contigo. Alegrada de haber cumplido ya dos de mis propositos del 2008 no puedo sino felicitarme, que aunque tengo abuela, hace demasiado que no voy a verla. Por fin pedi la beca. Y por fin he "moved on". Ahi se quedan. Ahi se acaba una etapa... Mas larga que un año. De casi una vida. Cuando se cierra una puerta, se abre una ventana... No se vuelve a reabrir la puerta. Aunque llamen a ella, enseñando la patita por debajo de la puerta. Ese es uno de los 2008 aims que me queda pendiente. Alguien puede ponerme en negrita la linea entre buena y tonta? Basta Ya.
***
Termino hoy cinco dias de malabarismos y peripecias, cinco dias en los que la media de horas de sueño han sido cuatro, que han incluido diez horas de avion, y otras tantas de autobus. Cinco dias que han incluido diez horas de peregrinacion, y otras diez de agonia. Termino tambien cinco semanas de asentamiento tras la mudanza, tanto ajetreo londinense me impidio terminar de desempacar. Me espera el jacuzzi, que me lo he ganado.
Notte.
lunes, 10 de marzo de 2008
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